El Congreso de los Diputados ha aprobado este jueves la reforma de la ley del aborto que devuelve a las menores de 16 y 17 años el derecho a interrumpir su embarazo sin consentimiento paterno, regula la objeción de conciencia, contempla bajas menstruales y obliga a los colegios a impartir educación sexual. La norma, que ahora tendrá que superar su último control parlamentario en el Senado, sale adelante con una amplia mayoría de la Cámara Baja y con el rechazo del PP, Vox y Ciudadanos. 

La ministra de Igualdad e impulsora de la ley, Irene Montero, ha celebrado en el Pleno el "paso muy importante" que se da con esta norma "para garantizar los derechos sexuales y reproductivos en nuestro país". "En un contexto de ofensiva reaccionaria, el feminismo sigue siendo el principal impulso democratizador de nuestra sociedad", ha subrayado durante su intervención desde el atril. 

Tras enumerar las principales medidas de la ley, Montero ha aprovechado para agradecer a las "madres" del proyecto, nombrando a feministas que vienen luchando por el derecho al aborto en los últimos años. Ha recordado también la labor del expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, quien impulsó la ley del aborto actual, de 2010, de la mano de la primera ministra de Igualdad de España, la socialista Bibiana Aído. 

La mayoría de grupos parlamentarios han elogiado un texto que consideran "necesario" e "importante", y que ha sido debatido en Pleno todavía sin el informe del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ni el pronunciamiento del Tribunal Constitucional (TC) sobre el recurso del PP a la ley del PSOE. 

Con todo, PP, Vox y Cs -que ya registraron sendas enmiendas a la totalidad sin éxito- han manifestado su rechazo a la norma, aunque por distintas razones. Los populares ven innecesaria la reforma, los de Arrimadas están en contra de "criminalizar" los vientres de alquiler (que pasa a considerarse una forma de violencia contra las mujeres en el texto y se prohíbe su publicidad), y los de Vox directamente consideran que es un atentado contra la vida. 

El CGPJ tacha la baja menstrual de la ley del aborto de "injustificada" y "estigmatizante" y critica que se eliminen los días de reflexión

Los socios de Gobierno celebran la ley

Los dos grupos que conforman el Gobierno de coalición han ensalzado el avance de la ley en las Cortes. "Esta ley existe porque existe un Ministerio de Igualdad", ha subrayado la diputada de Unidas Podemos Sofía Castañón, quien ha aseverado que ese departamento no se puede "perder" porque es "una brújula para lograr la conquista social". 

Desde el PSOE, Susana Ros ha respondido a las críticas de los grupos de la derecha incidiendo en que la reforma "no obliga a nadie" a abortar y que "la maternidad es una experiencia maravillosa si se trata de una opción adoptada libremente". "Esta reforma respeta el derecho de las mujeres a decidir de forma responsable", ha recalcado. 

"Aspectos en el tintero"

El resto de grupos también han valorado la ley, aunque con más reparo por las medidas que defienden y no han logrado introducir durante el periodo de enmiendas. "Quedan aspectos en el tintero", ha señalado la portavoz de Bildu, Isabel Pozueta, en referencia a la violencia obstétrica. También Pilar Valluguera, de ERC, ha lamentado que no se haya incluido el concepto de violencia obstétrica (la que se sufre durante el embarazo y el parto), solo porque "se puedan sentir ofendidos ciertos colectivos".  "Llamar a las cosas por su nombre las identifica, hace que seamos conscientes de ella y nos permite batallarlas", ha defendido. 

En Junts también consideran que debería añadirse el concepto y han mostrado su disconformidad con el hecho de que se recoja la gestación subrogada como una forma de violencia contra la mujer, "sin previo debate". Argumento en línea con el del PNV, cuyo diputado Joseba Agirretxea ha asegurado que es un asunto que debe legislarse a parte y "con tranquilidad". 

Lo que dice la ley

La norma -que salió del Consejo de Ministros a finales de agosto y todavía tiene que recibir el visto bueno del Senado- elimina la reforma llevada a cabo por el PP en 2015, y según la cual se impedía a las menores de edad interrumpir su embarazo sin consentimiento paterno. De este modo, una vez entre en vigor, las menores de 16 y 17 años recuperarán ese derecho que ya se fijó en la ley anterior, de 2010. 

Introduce otros aspectos importantes para garantizar esta prestación en la sanidad pública, como el registro de sanitarios objetores de conciencia (parecido al de la ley de eutanasia), y elimina los tres días de reflexión y la obligación de que las solicitantes reciban un sobre cerrado con información sobre las prestaciones del Estado en cuanto a maternidad. Además, contempla bajas temporales de preparto desde la semana 29 de gestación y bajas por menstruación incapacitante, costeadas por el Estado desde el primer día.

El PSOE y Podemos pactan crear en la ley del aborto un "defensor judicial" para las menores de 16 años con "discrepancias" con sus padres

Durante la tramitación en la Cámara Baja se añadieron en la ley una serie de novedades pactadas entre los grupos parlamentarios. Una de ellas es la pactada entre el PSOE y Unidas Podemos, y la cual contempla la creación de la figura de un "defensor judicial" de las menores de 16 años que entren en conflicto con sus padres o representantes legales en torno a una interrupción voluntaria del embarazo.

Como ya avanzó la secretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodríguez, en una entrevista para 20minutos, la ley prohibirá que los médicos objetores puedan participar en los comités clínicos que deciden sobre los abortos a partir de las 22 semanas. El cambio, impulsado a través de una enmienda de Unidas Podemos, fija que, a partir de la semana 22, la paciente podrá "recurrir en vía jurisdiccional" su decisión en caso de no estar de acuerdo. 

También sobre la regulación de conciencia, hay un cambio que busca impulsar las medidas necesarias para garantizar que no se discrimina ni a los sanitarios ni a los objetores, "evitando que se vean relegados en exclusivo" a la práctica de interrupciones del embarazo. Medidas que irán dirigidas también a los que sí son objetores de conciencia.